Paseos de la muerte, establecimientos médicos que no cumplen con los requerimientos mínimos y personal poco capacitado, son algunas de las situaciones cotidianas con las que se tienen que enfrentar las personas de nuestra ciudad cuando se enferman.
En Barranquilla, las EPS son motivo de casi mil quejas por parte de los usuarios. Las EPS del régimen subsidiado fueron motivo del 62% de las quejas, y estuvieron encabezadas por Emdisalud, seguida por Mutualsaer. Por su parte, el 38% de las quejas fueron contra las EPS del contributivo. Larga espera en la entrega de autorizaciones y negación del servicio fueron los principales motivos de inconformidad.
La Secretaría de Salud del Atlántico busca dar un vuelco positivo al buscar la acreditación que va en concordancia con los más altos niveles de calidad. Para esto, en la fase inicial se llevará a cabo una autoevaluación.
Por su parte, la reforma al sistema salud permanece aún como una tema crucial en la agenda de nuestros congresistas. Se intentará impulsar la ley estatutaria, que definiría los parámetros para que el Estado garantice el derecho a la salud para todos los ciudadanos. Además de la reforma, el gobierno ha aumentado los recursos destinados al sistema de salud, se le otorgaron giros directos a hospitales y los regímenes subsidiado y contributivo fueron unificados. En mayo se debatiría este importante proyecto.
La salud es lo primero, por eso esperamos que llegue pronto el día en que todas las personas puedan gozar de un óptimo servicio brindado por los entes de la salud. Que ya no haya interminables horas de espera para ser atendidos. Que ya no haya estructuras médicas pobremente equipadas. Que ya no haya más muertos en las puertas de los hospitales.
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