La recuperación del Centro

Olores nauseabundos, inseguridad, flujo excesivo de personas, mercancía de toda índole, frutas y verduras. Estas eran algunas de las cosas que hasta esta semana hacían parte del escenario cotidiano de la calle 30 del Centro de Barranquilla.

La Secretaría de Control Urbano y Espacio Público, de la Alcaldía Distrital, había sostenido que se llevaría a cabo un operativo para despejar el Centro. Cerca de 200 vendedores ambulantes fueron despejados, para recuperar casi 7 mil metros cuadrados de calle.

Todo el proceso se ha llevado a cabo por etapas. Inicialmente, fue una fase pedagógica y, luego de la recuperación actual, se focalizarán todos los esfuerzos en el mantenimiento y control de la zona.
Hay, sin embargo, otro lado de la moneda. Muchos comerciantes, que formaban improvisados puestos callejeros, se han quedado sin una forma de obtener ingresos. Además, temen las represalias que puedan tomar los prestamistas que manejan el “paga-diario” contra ellos, al no ser capaces de suplir las cuotas diarias, por el dinero que pedían prestado para comprar la mercancía.

Por otro lado, a los comerciantes de San Andresito, que lleva 50 años de funcionamiento, se les ofreció un pago para trasladarse de lugar. Mientras que la Alcaldía sostiene que haberle dado 1,500 millones al primer grupo de comerciantes que hizo el traslado fue un gran negocio, muchos de los comerciantes sostienen que no han sido escuchados, lo que ha generado fuertes protestas y manifestaciones.

¿Qué soluciones creen que puede haber para lograr que ambas partes estén satisfechas? ¿Con qué asocian el centro de nuestra ciudad? ¿Consideran que las medidas tomadas por la Alcaldía son las necesarias, o creen que existen otras alternativas más inclusivas y viables?

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